Hoy es mi turno de contar algunas cositas personales. ¡Hola! Soy Juanma, y en agosto del 2022 me diagnosticaron Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). El TDAH es una neurodiversidad, por la cuál el cerebro no genera dopamina y norepinefrina de la misma manera que en personas neurotípicas. Si bien se lo suele asociar a un trastorno de la niñez, no es algo que “se cura” al llegar a la adultez. Sus síntomas, como la distracción, la impulsividad, la desorganización y la sensibilidad emocional, afectan la vida cotidiana.
Esta condición se trata de diversas maneras. Existen varias medicaciones que suelen tener un impacto positivo en la vida de quienes tenemos TDAH. Yo mismo empleo una de estas medicaciones (metilfenidato) de manera esporádica (aunque normalmente su uso es diario). No estoy en contra del uso de medicación, ni mucho menos. A muchas personas realmente les cambia la vida. Pero como en Ananda nos gusta lo natural, intento complementar con algunos remedios naturales para el TDAH, y de eso voy a hablar hoy. Varias de estas cosas las hacía incluso antes de saber que tengo esta condición.
Terapia o coaching para TDAH
Para mí lo más importante es tener un buen acompañamiento. En mi caso personal, trabajo con un psiquiatra, aunque hay personas que lo hacen con psicólogos o coach. Es cuestión de encontrar la herramienta y la persona adecuada para cada une. Este acompañamiento puede ayudar a mejorar las decisiones, a entendernos, y, en lo que más me ayudó, es a ser compasivo conmigo mismo, perdonarme cuando no puedo hacer las cosas que se esperan de mí de la manera en que pueden hacerlas otras personas. Cuando me olvido la llave, pierdo la tarjeta del cajero, no voy al gimnasio, o me pierdo jugando videojuegos, por ejemplo.
Aromaterapia para manejar los síntomas de TDAH
No podía faltar este ítem en Ananda 🙂. Existen varios aceites esenciales que pueden ayudar con el manejo de los síntomas de TDAH. Mi ritual cuando tengo que concentrarme (para trabajar o estudiar) siempre incluye música tranquila, un sahumerio y nuestro roll on OM. Si bien pensamos el OM para sesiones de yoga y meditación, su sinergia de aceites esenciales (lavanda, incienso, pimienta y limón) es perfecta para quienes tenemos TDAH, ya que ayudan a relajarse y a enfocarse. En particular, el aceite esencial de pimienta tiene piperidina, el compuesto del cuál se deriva el metilfenidato (una de las principales medicaciones para TDAH, que se encuentra en el Ritalin, Consiv, Concerta y otros). También suelo usar mucho la bruma Dulces Sueños o la Bruma de Eucaliptus para aromatizar el espacio en el que me encuentro, principalmente cuando estoy en la oficina.
Alimentación sana para disminuir los síntomas del TDAH
Una relación sana con la comida es fundamental. Diversos artículos e investigaciones demuestran que los azúcares refinados, colorantes artificiales y alimentos ultraprocesados pueden incrementar los síntomas del TDAH, afectando especialmente la función ejecutiva y generando cambios de humor.
En cambio, otros alimentos ayudan a disminuir los síntomas, y mejoran tanto la función ejecutiva como la memoria operativa y a largo plazo. También pueden disminuir la hiperactividad o ayudar a dormir mejor.
- Proteína. El cerebro con TDAH responde bien a las proteínas: los huevos, legumbres, carnes (mejor si son magras, especialmente pescado) y frutos secos son buenas fuentes de proteínas, pero lo importante es encontrar cuáles son fáciles de incorporar tu día a día.
- Carbohidratos complejos. Verduras, frutas, frutos secos, cebada o quinoa son excelentes fuentes de energía que no se agotan rápidamente como lo hacen los carbohidratos simples (jarabe de maíz, azúcar, etc.).
- Los ácidos grasos omega-3 se encuentran en el atún, el salmón, las nueces y el aceite de oliva, y son muy útiles para el cerebro con TDAH. Algunos estudios demuestran que ayuda a disminuir la falta de atención y la hiperactividad mientras aumenta la memoria de trabajo, la regulación emocional y el sueño.
- Las vitaminas B que se encuentran en las legumbres, los cereales integrales, los porotos, las semillas, las espinacas y la palta se consideran súper alimentos que también reducen los antojos de azúcar.
- El zinc, el hierro, el magnesio y la fibra ayudan a regular la producción de dopamina y a controlar los síntomas del TDAH.
- Hidratarse correctamente es otra herramienta fundamental que ayuda a que el cerebro funcione mejor. La deshidratación puede impactar la función ejecutiva, la memoria y la atención. Además, quienes tenemos TDAH solemos tomar menos agua de la necesaria (por olvidos, por estar ultraenfocados en algo, etc.). Mi consejo es tener siempre una botella o un vaso de agua cerca.
Lo mejor, entonces, es tener una dieta balanceada, comiendo “de todos los colores”, como me decía mi abuela. Incorporar diversas fuentes de proteínas (especialmente pescado y legumbres) es fundamental. Yo suelo desayunar con mantequilla de maní, e incorporo carne o legumbres en el almuerzo. Lo que más me cuesta es evitar los azúcares refinados.
Suplementos dietarios
Existen diversos suplementos, minerales y vitaminas que pueden ayudar a tratar los síntomas de TDAH o disminuirlos. Yo no soy muy partidario de esto, pero para personas que no pueden cocinar a diario pueden ser una forma de incorporar esos nutrientes que no llegan a través de la comida. También se suelen recomendar algunas hierbas como Ginkgo Biloba o Ginseng.
Sinceramente no probé ningún suplemento (más que Berocca cuando era adolescente). En estos casos es fundamental consultar con un médico antes de probarlos.
Vida sana
Esto es tal vez lo más difícil, pero es fundamental. La alimentación, de la que hablamos más arriba, es sólo una parte de la vida sana. Hacer ejercicio de manera regular y dormir bien son fundamentales para disminuir los síntomas de TDAH. Si tenés problemas con este punto, te recomiendo dos artículos que escribimos hace poco: De cuando descubrí que me gusta hacer ejercicio y Trucos para dormir mejor. La meditación también es una herramienta que puede ayudarnos a estar más presentes en el momento y disminuir los síntomas.
Un estilo de vida saludable, con una alimentación balanceada, ejercicio, sueño regular, sociabilización y actividades estimulantes es fundamental para llevar una vida con TDAH lo más sana posible. No se trata de hacer lo mismo que las personas neurotípicas, sino de poder tener una vida equilibrada y en paz con nosotros mismos.